El objetivo de la terapia de pareja es explorar y ofrecer nuevas posibilidades a la relación, teniendo en cuenta las necesidades, la personalidad y el potencial de cada miembro de la pareja. Al mismo tiempo, la terapia de pareja pretende: facilitar una mayor y más profunda comprensión de uno mismo, del otro y de la relación; abrir nuevos canales de comunicación; modificar los patrones disfuncionales de la relación; elaborar los conflictos presentes y las heridas del pasado; fomentar el crecimiento y el desarrollo de cada individuo y de la pareja en su conjunto.